El submarino Titán, que intentaba llegar a los restos del Titanic, desapareció el pasado domingo. Desde ese momento solamente contaba con 96 horas de oxígeno que ya habrían descontado su tiempo.
La expedición que empezaba como una aventura terminó en tragedia. Las comunicaciones con el sumergible se perdieron dos horas después de dirigirse hacia los restos del emblemático Titanic.Fue una experiencia para los turistas que costó 250 mil dólares en la que viajaban el británico Hamish Harding, el paquistaní Shahzada Dawood y su hijo Suleman; el buceador Paul-Henri Nargeolet y Stockton Rush.
La Guardia Costera mantiene la esperanza de encontrar a los tripulantes con vida; la búsqueda sigue, a pesar del agotamiento de las reservas de oxígeno.
Fotografía: Forbes México