El departamento de Rocha se encuentra en el centro de un debate debido a la propuesta de instalar un puerto espacial en el balneario La Esmeralda.

Fotografía: Marcelo Campi


La empresa argentina Tlon Space presentó en 2022 un proyecto al Ministerio de Ambiente uruguayo para construir una plataforma de lanzamiento destinada a nanosatélites y microsatélites en un predio del Ministerio de Defensa Nacional, ubicado entre Aguas Dulces y Punta del Diablo.

Según la empresa, el puerto espacial permitiría el alistamiento, lanzamiento y asistencia técnica de vehículos lanzadores que pondrán satélites en órbita. Durante el primer año de operaciones comerciales, se contempla realizar un lanzamiento mensual, con la posibilidad de aumentar la frecuencia a entre uno y cuatro lanzamientos semanales en fases posteriores.


Sin embargo, la iniciativa ha generado preocupación entre vecinos e investigadores locales. La zona propuesta es reconocida por la UNESCO como Reserva de Biosfera y alberga humedales de importancia internacional bajo el Convenio de Ramsar, conocidos como los Bañados del Este. Los críticos del proyecto alertan sobre posibles impactos socioambientales, incluyendo riesgos para la biodiversidad, contaminación acústica y amenazas a especies en peligro de extinción, como la ballena franca y diversas tortugas marinas.


Además, se ha señalado una falta de información y participación pública en el proceso de evaluación del proyecto. El Ministerio de Ambiente clasificó la iniciativa como de tipo B, lo que no requiere una audiencia pública previa. No obstante, vecinos y organizaciones ambientalistas están solicitando mayor transparencia y la realización de una audiencia para discutir los posibles impactos y medidas de mitigación.


Por su parte, la Fuerza Aérea Uruguaya, que impulsa el proyecto desde el Estado, asegura que el impacto ambiental del puerto espacial será comparable al del tráfico que circula por la Ruta 9 y que se podrá continuar disfrutando de la playa, limitando el acceso solo durante los momentos de lanzamiento.


El proyecto aún se encuentra en fase de evaluación, y se espera que en los próximos meses se realicen estudios de impacto ambiental más detallados y se promueva un diálogo más amplio con la comunidad local para abordar las preocupaciones planteadas.


Félix Eduardo Cañizalez


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