El presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, expresó su preocupación por la situación financiera de ANCAP tras dar a conocer que la empresa estatal de combustibles registró en 2024 una pérdida de 118 millones de dólares, lo que marca el retorno a números negativos luego de más de una década de balances positivos.
La ministra de Industria, Energía y Minería, Fernanda Cardona, acompañó la exposición y señaló que será necesario revisar la cadena de distribución de combustibles, así como actualizar la metodología de fijación de precios, considerando factores como el petróleo almacenado en las reservas de ANCAP.
Orsi aseguró que se implementará un cambio profundo en la gestión de la empresa para revertir esta situación, garantizando que no habrá impactos en el bolsillo de los uruguayos. Sin embargo, desde la oposición, el Partido Colorado calificó las declaraciones del mandatario como “carentes de fundamento” y sostuvo que se busca justificar un "ajuste fiscal".
La situación de ANCAP se suma a otros frentes de preocupación para el nuevo gobierno, entre ellos los problemas en el Casmu, las demandas económicas vinculadas al Ferrocarril Central y la redefinición del Proyecto Neptuno.
Félix Eduardo Cañizalez